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2024 nos encontró en un nuevo espacio: la Biblioteca Popular «Caja de Créditos Correa», entre nos, «la Biblio». En el primer encuentro hablamos de la importancia de habitar espacios como el que nos encontrábamos: darles vida, vivirlos, ser parte; apropiárselo como comunidad. Les comenté mi grata experiencia como expositor en la misma Biblio y el rico intercambio de ideas que se da en las presentaciones o aperturas.
(Posteriormente ampliamos el concepto de habitar espacios: ¿cómo son? ¿los cuidamos? ¿estamos solos en ellos? ¿damos espacio a los demás?)
Este año intentamos poner el foco en la expresión de las tensiones, concepto cercano a lo que en psicología llaman «sublimación». Para mayor exactitud, me gusta hablar de «ritos de significación» (o de interpretación del mundo), entendiendo por ello poder expresar lo que nos sucede con «civilidad» (conceptos de trasfondo confucionistas); tratando de prevenir o atenuar respuestas más primitivas, como la violencia o la ansiedad. ¡Ojo! Primitivas en cuanto a un orden temporal, no jerárquico.
En la mayoría de los encuentros se plantearon temáticas, recomendando ciertas técnicas, pero con mucha libertad en la resolución. El contenido técnico, a diferencia de otras ediciones, se redujo al mínimo y necesario, principalmente en forma de «encuestas visuales», como guías para reconocer recomendaciones y puntos a reforzar.
Además, presentamos las herramientas creativas del taller, todas con versiones digitales y, las de uso individual, también con versión analógica para que nadie se quede fuera.
Un día antes de la exposición, realizamos una suerte de «Vernissage». En el mismo, además del pic-nic y conversar sobre la exposición, jugamos al «Pictoretto», un Pictionary pensado para los talleres. Nos ayudaron, fiscalizando el resultado, Ana, y, en la parte técnica, mi hija Helena.
Dato: El término vernisage viene del francés vernir, que significa «barnizar». Originalmente, se refería al barnizado final de las obras antes de exponerlas. Los artistas invitaban a un selecto grupo de personas a presenciar este momento, convirtiéndolo en una especie de preestreno o evento social
El equipo 2 se llevó los potes de témpera que sobraron 👏👏👏.
La exposición se llevó a cabo el jueves 5 de diciembre de 2024, permaneciendo abierta al público hasta el jueves 19 del mismo mes. A pedido de los asistentes (aka tintorettini), ampliamos las jornadas de producciones de 2 a 3. Nos hemos encontrado con obras preciosas: mucho mensaje, mucha expresión, muchos colores, también paletas reducidas muy bien elaboradas, mucha expresión en las líneas, muchas pinceladas enérgicas, también sutiles, y composiciones geniales. Completísimos.
Este año, en lugar de imprimirlos en papel, decidimos proyectar tanto los collages de las producciones realizadas de cada encuentro, como las fotos y la infografía de las temáticas trabajadas. Para ello, nos servimos del proyector de la Biblio y dos televisores.
Expusieron: Amadeo Acosta, Amanda Tadeo, Amarú V. Dominguez, Anna Focco, Emilia Baigorri, Emilia Dibono, Emilia Vogler, Francisco Meloni, Ignacio Giordano, Keila Jäger, Leonela Quintana Ferro, Lucas Mancinelli, Luciano Correa, Matilda Irazoqui, Nina Spinetti, Paulina Devotto, Pilar Monti y Ramiro Salvucci.
Nuevamente los certificados tuvieron íconos que reflejan determinadas características de los tintorettini, tanto para con el taller, como por sus trabajos y el contenido. Como siempre, creemos que toda valoración es válida bajo determinadas circunstancias: el profesor, el horario, el espacio, los compañeros y compañeras; todo esto y más, es parte de un momento. Por ello, no los definen como personas ni mucho menos los ligan, de forma indisoluble, con acciones o actitudes sucedidas en dichas circunstancias.
(Vale la pena repetirlo siempre. Pueden ver la explicación de 2022 por acá)
Guiados por aquel testimonio de 2022 en cuanto a la asociación compromiso-evaluación-premio, asociación tan inculcada en nuestra educación, decidimos experimentar un poco más con la idea de gamificación. Así, en modo de agradecimiento e intentando reflejar, principalmente, el compromiso, entregamos stickers. Los mismos estarían relacionados con la constancia, la asistencia y la atención a los contenidos y las propuestas. Además, otorgamos otros tres muy especiales para quienes tuvieron una destacada incidencia, por momentos indispensable, en la unión y dinámica de su grupo.
Dato: El concepto fue tomado de los «bagdes» o insignias que se le entregan a niños y niñas exploradoras, y hoy se usan en videos juegos y plataformas educativas digitales.
¿Significa que los que no recibieron no tuvieron nada de ello? Al contrario, todos tuvieron un año excelente: fue muy difícil la selección y apelé a «cuestiones estadísticas». Así mismo, comprendo que resulta muy difícil desvincular las valoraciones personales y la tendencia a compararse con los demás. Por momentos, la distinción a un otro parece sentirse como un castigo para uno mismo o un menosprecio a nuestras cualidades. Y, claro está, no lo es, al contrario.
Asistieron a los 24 encuentros, al vernissage y a la exposición.
Desde que se sumaron, tuvieron una asistencia perfecta a los encuentros «oficiales».
Si bien todos lo hicieron en su medida, estos tintorettini son los que más se coparon con las propuestas y las recomendaciones dadas, con resoluciones que hemos destacado y han sido de mucha ayuda para explicar los temas tratados (este año y los próximos 🙂).
Todos hicieron que este año sea excelente y, estos tres tintorettini, uno por grupo, por momentos, fueron fundamentales para que eso suceda. ¡Gracias!
Post exposición, se entregaron stickers reconociendo a los nuevos integrantes y quienes han decidido continuar con la experiencia de los talleres, ¡gracias, totales!:
(Sinceramente, me he olvidado de entregarlos en la expo, mil disculpas. Todo es aprendizaje, todos aprendemos. Siempre. 🤗🤗)
El compromiso es algo muy importante para nosotros: creemos plenamente que, para que exista comunidad, debe haber compromiso y, antes que todo, Tintoretto es una comunidad.
Durante la planificación de cada encuentro y su contenido, tenemos en cuenta aquello que cada uno de los tintorettini puede aportar, tanto en interacción y actitud, como en conocimiento y habilidades, ya sean personales o familiares. Por este motivo, también solemos esperar a que lleguen todos para comenzar. Una vez más, agradecemos el compromiso, tanto en la asistencia como en el aviso de la inasistencia. Fue muy importante y de mucha ayuda para mi y para todo el grupo.
Tras realizar el célebre encuentro con invitados colgamos nuestro «primer trapo» en la Biblio. En el mismo, ejemplificando con Frankenstein, reflexionamos sobre la «monstruosidad»: Monstruo… ¿se nace? ¿se hace? ¿Cuál es el lugar del «monstruo» en nuestra sociedad.
Los trabajos estuvieron expuestos desde ese momento hasta el cierre de la exposición de fin de año.
En un encuentro que nos vimos atravesados por una gran tormenta, lo cual mermó considerablemente los asistentes, decidimos probar una técnica vista en las redes sociales.
Diego Baigorri (Argentina, 1984). Desde niño ha desarrollado su creatividad a través del dibujo, música, literatura y programación, realizando sus primeras exposiciones artísticas, publicaciones gráficas y aplicaciones informáticas a corta edad. Sus obras pictóricas han sido expuestas, formando parte de catálogos locales y ferias internacionales, en Paris, Nueva York, Londres, Roma, Barcelona y Dubai, entre otros lugares.
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